5/11/10

La Etapa del Filósofo

Para serles sinceros, debo reconocer que no recuerdo cuándo escuché la palabra filosofía por primera vez, no sé si era muy grande, o era muy chico; no recuerdo cuál fue la explicación que me dieron de ella, y peor aun, no recuerdo si la pedí; tampoco recuerdo cómo supe qué era la filosofía, y lo más lindo de todo, es que todavía no sé que es.

Me pidieron que escribiera algo para el blog, que contara mi experiencia con la filosofía para niños, y ahora que me siento frente al teclado, me doy cuenta que ha sido bastante poca, pero creo que esa también es una de las razones de este “proyecto” (lo pongo con comillas porque ha evolucionado bastante),que todos nos impregnemos un poquito de esta disciplina, pero sin embargo, es el primer paso en un proceso que considero bastante largo, y como todos los primeros pasos, este debe darse con la mayor de las precauciones, ya que nos podemos fracturar y no poder caminar (o intentarlo) durante un largo tiempo.

Una de las razones por las cuales creo que sería importante darle hincapié a la filosofía para niños, es el prejuicio que existe frente a la filosofía. Es bastante común ver en los estudiantes una actitud de rechazo frente a la asignatura, y haciendo una generalización digo que quizás no se han dado el tiempo de siquiera saber de que se trata, y hablo desde mi experiencia cuando digo que esto se ha convertido en un círculo vicioso, en el cual los alumnos que salen les dicen a los que entran que es fome, aburrida, latera, que no tiene sentido, y entonces, ¿cómo queremos que lleguen con una buena actitud, si los alumnos vienen dispuestos a que se les entregue algo fome, latero y aburrido? En este punto la predisposición de los alumnos nos juega en contra al momento de enseñar filosofía.

Les hablo con sinceridad cuando les digo que hay que atacar el problema desde la raíz. Hace poco se me acercó mi primo de 12 años, me preguntó qué estudiaba, y cuando le dije, noté que él no estaba con la predisposición a que le dijera algo fome, ni aburrido, ni latero, sólo tenía la gran duda de saber qué era eso que llamaban filosofía, y noté que quizás si los alumnos llegaran con otra mentalidad a la enseñanza media, diferentes cosas podríamos hacer. También cabe recordad que en la cultura popular existe algo a lo que los padres llaman “la etapa del filósofo”, que es la etapa donde los niños pequeños preguntan por todo, absolutamente por todo, “por qué esto”, “por qué aquello”, quizás con un poco de “filosofía para niños” podríamos hacer que esta etapa no sea tan sólo eso, y sea una actitud frente a la vida, una actitud diferente frente a la vida.

¿Es importante la “filosofía para niños”? quién lo sabe, yo todavía estoy en la etapa del filósofo.


Saludos!
Nicolás Parra Aravena

1 comentario:

  1. Espero que con esta iniciativa, la filosofia crezca y de frutos a la educación chilena.

    Ro!

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